Miró de lejos el mar grisáceo de nuevo,
arañando cada recuerdo entre sus brazos.
Sintió dos lagrimas acariciar las mejillas,
evocando el matiz de la voz ,en su mente.
Y dibujó en el malecón su figura hermosa,
distorsionada vagamente, por el paso de los años.
Allí lanzó sus cenizas aquel 4 de enero,a las 3.25,
justo en el preciso lugar que mas amaba.....
Y busco en el aire sus abrazos enamorados.
alucinada entre las sombras de su soledad.
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Lanzó un grito de loba en el espacio,silencioso.
"No se vivir sin ti,amor"....
Y escuchó en el silbido triste de las rocas,
la nostalgia profunda y suave de su voz.
"No se vivir sin ti,amor".Grito el eco...
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Y acarició el sonido, en la inmensidad de la noche,
mirando el cielo estrellado,
que coqueto....giraba extasiado de amor.....
Lorenzo Valenzuela Texto declarado en la Sgae.
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