Días dorados se mecen suavemente,
en la ventana intima de mis sueños.
Días de hermosura que acompasados,
escriben poemas azules en mi soledad.
Silencio infinito....
Ya llega su mirada pausadamente....
Repartiendo en el aire la hermosura,
de su alma callada y profundamente mía
Dejando en el aire su perfume de alondra,
flotando ingrávida entre mis besos claros.
Días de ensueño repartidos en el aire,
sin tiempo....sin sombras.....sin tristezas....
Días asombrados nos contemplan sonriendo,
escuchando su risa de campanario alegre y claro.
Silencio infinito....
Ya se va para siempre calladamente....
Repartiendo en el aire su dulzura,
aferrada a su clara y profunda inmensidad.
Lorenzo Valenzuela.Texto declarado en la Sgae.
No hay comentarios:
Publicar un comentario