¡Noemí,salto de alegría viendo llegar al payaso¡
El mismo que diez minutos antes,
hizo feliz a tanta gente,con la muecas de sus ojos.
¡Que bonito trabajo tienes Agamito¡
Te voy a contar una cosa, que nadie sabe,
porque huelo que quieres conocerme mejor.
¡Siiiii,de mayor quiero ser como tu¡.¡Hacer feliz a la gente¡.
¡Sabes que es lo mas bonito de ser payaso de circo?.¡Guapita¡.
¿Que Agamito?. Sonrió la niña entusiasmada.
Cuando llora mi sensible corazón.
y veo reír tanta gente con mis payasadas.
Siento que en mi alma se curan las heridas,
haciendo feliz cada noche,a todos esos niños.
¡Cuando la vida te parezca agobiante,
sonríe a los demás y así curaras un poquito tu tristeza¡.
¡Sonríe,este mundo necesita miles de sonrisas¡.
La niña hizo un gesto de admiración sincera y dijo.
¡Gracias por tus palabras Agamito,eres el mejor¡.
Y corriendo hacia los brazos de su madre,
observó la sonrisa de aquel triste payaso,
y vió en sus ojos el resplandor del sol.
Texto declarado en la Sgae.
No hay comentarios:
Publicar un comentario